Cuando vamos a amueblar y decorar para alquilar, debemos pensar en el tipo de inquilino que queremos tener y las posibilidades que ofrece el inmueble.

A partir de estas dos condiciones, existen una serie de elementos y estilos que siempre son una apuesta segura. Elecciones como los colores, la iluminación, los tejidos de cortinas o estilo del mobiliario, van a ser clave para conseguir nuestros objetivos.

Basándonos en la experiencia de nuestro equipo de Invest Home Group, cuando preparamos una vivienda para ser alquilada, con el proyecto decorativo se debe conseguir que el espacio transmita sensación de limpieza, luminosidad, que sea acogedor y alegre. Esto se consigue con pocos muebles pero modernos, con colores claros, líneas rectas, siguiendo las tendencias pero sin ser exagerados. Estilos como el nórdico, o la mezcla entre nórdico y japonés o llamado también «japandi» son última tendencia y están focalizados en transmitir este tipo de sensaciones.

Pero también es importante de cara al alquiler, buscar un equilibrio entre lo estético y lo práctico. Tienen que ser muebles de fácil limpieza y resistentes.

Un sofá de piel es muy elegante, pero debemos tener en cuenta que además de caro, cualquier mancha de líquido difícilmente se elimina. Tampoco debemos meter muebles muy valiosos o que tengan un alto valor sentimental, ya que corremos el riesgo de que se estropeen.